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Cómo puede ayudarte un detective si desconfías de tu equipo comercial con el mystery shopper
El control de la productividad de los empleados es uno de los objetivos prioritarios para muchas empresas, ya que muchas pérdidas de un negocio vienen en este sentido. Pero esto no es siempre fácil, porque muchos empleados trabajan de manera itinerante y, por supuesto, la reacción de todos ante el control directo de un jefe siempre es condicionada.
Un detective privado profesional, como mystery shopper, juega un papel fundamental en la realización de un control eficaz de la productividad de los empleados de una empresa. Su capacidad para realizar seguimientos y vigilancias es vital a la hora de asegurar que los empleados que trabajan en la calle y en el mismo negocio son eficaces en el cumplimiento de sus tareas.
El cliente misterioso
Un detective privado también puede hacer un control del trabajo del equipo comercial de una empresa adoptando el papel de cliente misterioso o mistery shopper. Es decir, infiltrándose en el negocio como un cliente y comprobando como actúan los empleados en diversas situaciones.
Con un detective ejerciendo de mistery shopper es posible tener una valoración profesional de su capacidad de resolución de problemas, sus conocimientos sobre su trabajo e, incluso, sobre el funcionamiento de la empresa. De esta manera, se calibra con exactitud su nivel de eficiencia.
Todas las conclusiones del trabajo de un detective privado profesional ejerciendo como cliente misterioso se presentan en forma de informe detallado, que puede servir incluso como prueba en caso de juicio contra algún empleado.
Especialmente importante es el trabajo de un cliente misterioso en el ámbito de la hostelería y la restauración, ya que un detective especializado puede examinar todos los elementos relacionados con el negocio, como la limpieza o la imagen del local y los trabajadores.
Investigar fraudes laborales
Un detective privado no sólo tiene que seguir a un empleado que trabaja en la calle para evitar que se escaquee de sus obligaciones. También resulta clave para que una empresa se enfrente al fraude laboral de la mano de empleados nocivos que realizan prácticas tan negativas como espionaje, falsificaciones o robos.
En definitiva, un detective privado profesional aporta a cualquier negocio la tranquilidad de saber que cuenta con los mejores empleados para conseguir sus objetivos.