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Investigación de arrendamientos
En la actualidad, el mercado de los arrendamientos urbanos en vivienda se caracteriza por la coexistencia de dos situaciones claramente diferenciadas. Por un lado, los contratos celebrados al amparo del Real Decreto-ley 2/1985, que representan aproximadamente el 20% del total y se caracterizan por tener rentas elevadas y un importante grado de rotación ocupacional como consecuencia de su generalizada duración anual. Por el otro, los contratos celebrados con anterioridad a la fecha de entrada en vigor del Real Decreto-ley 2/1985. En general, se trata de contratos con rentas no elevadas y, en el caso de los contratos celebrados con anterioridad a la Ley de 1964, aproximadamente el 50% del total, con rentas que se pueden calificar como no rentables.
Ante esta situación, la investigación privada que llevamos a cabo en Global Risk nos permite detectar el uso inapropiado de estos contratos y aquellas situaciones en las que, habiendo tomado medidas notables, ha habido cambios que requieren la actualización de la vivienda o los ingresos locales.
Uno de los servicios más demandados a nuestra agencia de detectives privados consiste en comprobar alquileres de renta antigua. Dichos alquileres se encuentran sub-alquilados a terceros sin consentimiento. El inquilino se aprovecha de una situación de renta antigua para sacar un beneficio. A veces la contratación de un detective privado puede ser la única vía para comprobar este tipo de conducta.
Podemos resaltar algunas problemáticas que se derivan de este tipo de investigaciones:
Falta de ocupación, subarriendos no consentidos, duplicidad de domicilios, actividades no consentidas. Muchas veces tras la firma de contrato de alquiler de una vivienda o local una de las partes decide no cumplir con lo pactado y unilateralmente decide hacer una conducta contraria al derecho. A veces una de las partes nos sorprende con una conducta que no es esperada, en ocasiones las personas parecen no ser tan civilizadas como se pensaba.
Por desgracia, muchas de las personas que realizan estas conductas son personas que reiteran una y otra vez y utilizan este sistema de falta de ética y moral como estilo de vida aprovechándose de personas con buena fe.
Así, cabe destacar una modalidad consistente en sub alquilar a otros sin contar con la autorización del dueño. También aquellos individuos que tienen constantes problemas con la comunidad de propietarios, inquilinos que tienen animales cuando está prohibido en el contrato su posesión, alquileres destinados a un fin distinto al que se pactó, alquileres sin licencia para abrir un local y lo realizan, que vivan más personas de las permitidas en una vivienda, obras ilegales en el domicilio, etc.